desdelaindia

a veces parece que llegué ayer... y a veces se me olvida que estoy en India...

domingo, marzo 23, 2008

Viajeros



Y sí, me cambió la vida, no imaginaba yo cuanto. Mi blog se bloqueó, como el resto de mis actividades diurnas, y me quedé en septiembre, en el once para más señas. Después pasé por aquí como de soslayo, como quien no quiere la cosa me dejé caer pero sin estar del todo, sin avisar de que llegaba. Y es que son pocas las tardes que me restan unas horas para hacer lo que me dé la gana y, aún así, a veces, parece que llevas conmigo toda la vida, y otras se me olvida que ya estás a mi lado… raro, no?… “Uy!, si tengo un hijo…”, me digo a mí misma cuando me distraigo de mis quehaceres maternales. Ya cada vez me pasa menos pero aún hay veces que…

Y es que no hace tanto de esas mil y una noches por tierras lejanas, con él, con la mochila ligera a la espalda y las nuevas caras de cada mañana.

Con él sigo caminando, con la mochila de Teo en el pecho, la bolsa llena pañales y las mismas caras cada mañana. Es bonito, también, sin embargo es extraño, también...

Echo de menos mi viaje, mi otro viaje, aunque no lo cambie por el que vivo ahora. Y echo de menos a esa gente maravillosa que conocimos de viaje, en el primer viaje… a Esther, a Angelie, a Iñaki, a Álvaro, a Axel, Toni, Ángel, Silvana, Sylvain, Omar, Jordi, Juanan, Jacobo, Andrea, Petros, Edurne, Marcos, Sandra, Sara, Ainhoa, Mayte, Gopal, Choco, Cristinas (2), Jorge, Alicia, Alejandro, Joan, Chus, Eider, Elisa, Idoia, Jaume, Manuela, Ricardo, , Nuria, Merixell, Reyes, Teresa, Xabi, Kavita, Anne, Raj, Tiru, Pablos (2), David… y me dejo a tantos… cada uno con su historia, con sus vidas llenas y sus mochilas ligeras... y no tan ligeras...


Teo va creciendo, sin prisa pero sin pausa. Es un niño muy activo y feliz. Un terremotillo pequeño que cada día descubre algo nuevo. Y aunque aquí le queda mucho por aprender, estoy deseando llevarlo a conocer otros mundos, otras culturas, otras gentes… Con él, con la mochila ligera a la espalda, con las nuevas caras de cada mañana y el recuerdo de las caras cotidianas que echaremos de menos en nuestro nuevo viaje.

Y la bolsa llena de pañales… ¿quién dijo mochila ligera?

Y ya que has llegado hasta aquí:

http://www.avaaz.org/es/tibet_end_the_violence/98.php/?cl_tf_sign=1